El Cambio Climático es un conjunto de fenómenos que se presentan como resultado del incremento sostenido y prolongado de la temperatura media del planeta. Este aumento térmico tiene repercusiones en la intensidad de los eventos climáticos en todo el mundo. Se observan huracanes cada vez más devastadores, sequías prolongadas, olas de calor extremas, aumento del nivel del mar y deshielo de los glaciares, entre otros fenómenos que amenazan la existencia de la vida en nuestro planeta. El cambio climático puede darse por procesos internos naturales o por forzamientos externos como erupciones volcánicas o acciones antropogénicas persistentes. Lo antropógeno se refiere al efecto, resultado o proceso de la actividad humana.
Algunas de las principales causas del cambio climático incluyen: emisiones de gases de efecto invernadero producto de la quema de combustibles fósiles como el petróleo, el gas natural y el carbón, estos liberan dióxido de carbono (CO2) y otros gases de efecto invernadero a la atmósfera, aumentando el calentamiento global. La eliminación masiva de bosques contribuye al cambio climático, ya que los árboles actúan como sumideros de carbono, absorbiendo CO2 de la atmósfera. La producción de alimentos a gran escala conlleva el uso intensivo de fertilizantes y la cría de ganado, que emiten óxido nitroso (N2O), otro gas de efecto invernadero. Las actividades industriales liberan gases contaminantes y aerosoles que contribuyen al cambio climático. La conversión de tierras naturales en áreas urbanas o agrícolas altera los ecosistemas y puede aumentar las emisiones de gases de efecto invernadero.
Entre los efectos del cambio climático se encuentran: elevación de temperaturas, tormentas más potentes, aumento de sequías, aumento del nivel del océano y calentamiento del agua, desaparición de especies, etc. Y parte de las consecuencias de estos efectos son: enfermedades, estrés hídrico, desastres naturales, migraciones internas, hambruna, desnutrición, disminución de la producción agrícola y pesquera, desplazados por inundaciones, escasez de agua y alimentos, entre otros.
El cambio climático es un fenómeno global que afecta a todas las personas, pero sus impactos no son iguales para todos. Las mujeres son uno de los grupos más vulnerables a sus efectos debido a las desigualdades de género existentes en la sociedad. El acceso limitado a recursos naturales como el agua y la tierra, la carga de trabajo adicional en situaciones de desastres y la exposición a mayores riesgos de violencia sexual son solo algunas de las formas en que el cambio climático afecta la vida de las mujeres.
Las mujeres, junto con otros grupos socialmente discriminados como los niños y niñas, las personas mayores, las personas viviendo con VIH, las personas con capacidades limitadas, las minorías étnicas y los migrantes, son los más vulnerables a los efectos del cambio climático debido a su menor acceso a recursos, oportunidades y poder.
La desigualdad de género expone a las mujeres a un mayor riesgo frente a una amenaza natural. Por ejemplo, las mujeres ocupan el 65% de los empleos más vulnerables a nivel global, lo que sugiere una mayor vulnerabilidad a la pérdida de medios de vida. Durante las fases de emergencia y recuperación, las mujeres y las adolescentes ven aumentada su carga de trabajo añadida al triple rol de cuidado de la familia, de generación de ingresos y labores comunitarias que desempeñan en situaciones de normalidad. Además, la salud de las mujeres también se ve afectada, reportándose síntomas de estrés post-desastre mayormente por mujeres; y aumento de la violencia de género contra mujeres y niñas en los contextos de crisis.
En América Latina y el Caribe es urgente atender los efectos del cambio climático y formular estrategias de adaptación y mitigación acordes con la realidad regional. Es importante reconocer que el cambio climático tiene impactos directos sobre los recursos naturales que son esenciales para la vida cotidiana como son el agua, los alimentos, la disponibilidad de fuentes de energía y la biodiversidad. La escasez o la dificultad de acceder a estos recursos puede tener serias implicaciones desde una perspectiva de género y uso del tiempo. Las mujeres, especialmente las mujeres rurales, indígenas y campesinas son las principales responsables de la alimentación familiar, así como de recolectar recursos básicos para la subsistencia de los hogares. Estas responsabilidades, asignadas culturalmente, corresponden al trabajo no remunerado realizado por niñas y mujeres y la escasez de estos recursos esenciales puede aumentar el tiempo que deben dedicarse a ello, resultando en la profundización de los nudos estructurales de la desigualdad.
Enfrentar la complejidad del cambio climático es un desafío para todo el mundo. Es necesario reconocer que sus impactos no son iguales para todas las personas y que se requieren medidas específicas para abordar las desigualdades de género que se reproducen y potencian con este fenómeno global. Solo así podremos construir un futuro más justo y sostenible para todas las personas.
Referencias
- Aguilar Revelo, L. (2021). La igualdad de género ante el cambio climático ¿Qué pueden hacer los mecanismos para el adelanto de las mujeres de América Latina y el Caribe? In Cepal. Asuntos de género. Serie 159. www.cepal.org/es/publications Publicaciones
- Casares García, R. (2013). Mujeres y niñas en contexto de desastres. Tres estudios de caso sobre vulnerabilidades y capacidades en la República Dominicana. 64. http://dipecholac.net/docs/files/caribe/mujeres-y-ninas-contexto-desastres-16.pdf
- (2022). Lo básico que debemos saber en el marco del Cambio Climático. Observatorio Nacional de La Crisis Climática, 1.
- Rodríguez, J. (2021). Cambio Climático (1st ed.). AMALIVACA EDICIONES.
- https://www.un.org/es/climatechange